Durante un evento público, Bibi, un perro entrenado en detección de explosivos, detectó una bomba oculta en un área concurrida. Con su olfato altamente desarrollado, alertó a las autoridades, permitiendo una evacuación segura antes de que la bomba pudiera detonar. Su rápida acción y su entrenamiento meticuloso salvaron incontables vidas y lo convirtieron en un héroe entre la multitud.
